lunes, 7 de julio de 2008

Un empate que sirve

El lomo empató de visitante un partido que por como comenzó pintaba mas negro que los colores del campeón, 3 minutos del primer tiempo y gol en posición adelantada del local. De ahí en más el local "LA V" continuó apostando a la velocidad de sus delanteros, con pelotazos que llegaban tan altos que se veían desde la ruta 8. Eso es jugar al fútbol?.
El lomo en tanto tuvo la posibilidad de empatar el encuentro tras un rebote que dejó boyando el arquero de un tiro libre de Trombetta, el jugador mas incisivo de la visita durante el partido y el PAMPA que con su experiencia logró empujar al equipo a la remontada.
El local tuvo solo una llegada en el primer tiempo, y la visita también.
El segundo tiempo aumenta la diferencia el local y el lomo que buscaba el descuento tal es así que llega por medio de un penal clarísimo en el que hasta le pisan la cara al artillero lomo negro (ensangrentado sale para que lo asistan) y Matías Gutierrez cambia el penal por gol 2a1 y la visita no bajaba nunca los brazos, como lo dijimos en domingos anteriores el mayor enemigo del campeón es el lomo negro, y ayer si bien no se jugó de la mejor manera se intentó tener la pelota, algo que el local no hacía, porque por medio de incanzables pelotazos apostaba a sus delanteros.
El segundo gol llega de un centro al área de Nacho Ayuso en el que el Pampa la baja al área y luego de unos rebotes Pablo Minguer dispuesto a conectar el balón recibe un planchazo en su pie derecho, no fue indirecto porque lo pisó al "colo".
Penal (segundo que se nos había negado en varios partidos) cmabiado por gol, grito del PAMPA y a pensar en Sancti Spiritu.
Paso a paso el Lomo quiere...



Poco. Demasiado poco para un campeón. Teodelina FBC está pasando por un mal momento (todo lo que va del campeonato en realidad) y ayer quedó demostrado. Carece de generación de juego en el medio y depende casi exclusivamente de lo que pueda hacer el “Pampa” Biaggio con su oficio. No obstante, en el fútbol a veces se liga. Y justamente de eso se aprovechó bien el “Lomo Negro” en cancha de Sportivo Rivadavia para igualar increíblemente 2 a 2, un encuentro que perdía 2 a 0.
La “V” jugó mejor, mereció claramente la victoria. Tuvo un funcionamiento sólido, casi no sufrió en su arco y generó varias posibilidad en el contrario. Sin embargo sufrió con lo que reza esa frase hecha de que el 2 a 0 es el peor resultado. Aunque, hay que decirlo, no fue fundamentalmente por errores propios, sino por equivocaciones de la terna arbitral.
Hubo tres jugadas claves para apoyar esta afirmación. La primera fue un gol anulado dudosamente por una supuesta posición adelantada de Caballero, no muy protestada porque el resultado todavía estaba 2 a 0 para el local. La segunda fue a continuación. El “Pampa” Biaggio se metió en el área con pelota dominada y ante la marca de dos defensores, cayó, y Sandro López cobró un penal más dudoso que la jugada anterior: 1 - 2 a través de la ejecución de Matías Gutiérrez.
Teodelina tenía tiempo para ir a buscar la igualdad; lo que no tenía era peso ofensivo ni ideas claras. Entonces, llegó la tercera jugada clave. A segundos del final, Caballero recibió una pelota solo y claramente habilitado, para iniciar una contra que pintaba para ser definitoria. A instancias del juez de línea Norberto Giménez, López sancionó posición adelantada y le dio la oportunidad a la visita de tirar el último centro al área local, que sería fatal para la “V”.
Como no podía ser de otra manera, el equipo de “Charango” Manccini en pleno se metió en el terreno de Mauro Astrada y compañía, y el entrevero fue inevitable. Como se sabe: “A río revuelto, ganancia de pescadores”. Vino la pelota llovida al área, todo se hizo muy confuso y la escena culminó con Pablo Minguer en el suelo tras recibir una patada en el aire y López señalando el punto del penal. ¡Bingo para Teodelina!
El “Pampa” no perdonó y todo el conjunto visitante terminó festejando en el círculo central un empate con sabor a victoria muy importante para el complicado momento que atraviesan.
Rivadavia se quedó con la sensación de tener la manos vacías y razones no le faltaban: empató de manera increíble un encuentro que ni los más optimistas hinchas visitantes pensaban que podía finalizar de otra manera que no fuera victoria de la “V”.
Nota publicada por (M. C.) en la Guía Semanal